En un pequeño pueblo vivía una familia integrada por Papá, Mamá y su hermana, un Oso, una oveja y una ardilla … Vaya familia rara esta, ¿por qué no tres osos? ¿Por qué no tres ovejas? ¿Por qué no tres ardillas? Bueno, la explicación es muy sencilla, así es la vida, debe haber de todo un poco porque sino sería extremadamente monótona y aburrida.
Imaginen ustedes, tres osos, el gasto sería infinito en comida, además duermen demasiado, son perezosos y de vez en cuando, cuando están rabiosos echan sus zarpazos al que les caiga. Si hubiesen sido tres ovejas, el tiempo se les hubiese ido en sentarse a contemplarlas, después de ponerles comida y una que otra vez acicalarlas, para quitarles la lana, no hay mucho que hacer, es un animalito muy dulce pero de poca actividad. Ahora, cosa muy diferente la naturaleza de la ardilla, ahí la cosa se pone un poco más difícil, inquieta y fastidiosa, con tres ardillas hubiesen enloquecido.
Cada quien tenía su rol en aquella casa, el papá trabajaba todo el día, llegaba cansado a descansar y ver un poco de televisión, la madre se le iba el día en los quehaceres del hogar, lava que lava, plancha, cocina, limpia aquí y limpia alla, recoge, lava los trastes y como si fuera poco, atender a estas tres criaturas. La tía, también trabajaba, pero compartía responsabilidades con su hermana, ella ponía orden y asignaba tareas y dedicaba buena parte de su tiempo a crear hábitos en estos tres pequeños.
Bueno, tampoco es que era tanto, pero el oso tenía su carácter, le gustaba imponer sus gustos y su fuerza y tamaño bien que lo ayudaban, de temperamento voluble iba y venía, su momento favorito era el de la comida, luego con su barrigota llena, su segundo momento favorito era descansar, se tiraba en un mueble en el que solo el podía estar, libre Dios que la ardilla se le ocurriera tratar de quitarle su espacio, pero bueno, ella también tenía sus maneras de desquiciar a este personaje.
Con la oveja la vida transcurría tranquila y sin mucho que hacer ni preocuparse, tenía sus rutinas, era de andar muy pausado y no le gustaban los inconvenientes creados por los otros dos, se mantenía lejos, pastando y observando la intranquilidad de la ardilla y el temperamento del oso, sin poder hacer mucho, siempre en el medio. De carácter dulce y ojos grandotes, parecía no impresionarse por nada, obediente y a veces hasta el extremo, pues dejaba muy mal parados a aquellos dos, a los que la vida se les iba en discutir y ponerse de acuerdo hasta para dormir…
La ardilla en cambio, nació para romper las reglas de aquel cuadro, en el que a todos se les hacía muy cómodo llevar sus rutinas y cumplir las normas, ella brincaba de aquí para alla, retaba, además, parlanchina y necia…
Bueno una vida bastante normal, plena, feliz y sin menores contratiempos…
Pasaron los años y el tiempo, como de costumbre, hizo su trabajo de madurar y separar, cada uno tomó su rumbo para poder hacer familia y así, ya dejó de ser una familia para convertirse en tres más, el oso con sus osas, porque solo tuvo hembras pero muy tiernas y cariñosas, la oveja con su ovejita, por cierto idéntica a ella, tranquila y de ojitos muy muy grandes y la ardilla salió con dos varones, que por fin le dieron un poco de que ocuparse y finalmente se ha quedado un poco más quieta…
Ley de vida, a todos nos llega el momento de crecer y formar nuestro núcleo, abandonar el nido y volar, meter en un saquito lo aprendido, lo que tenías a medio hacer y lo que aún ni siquiera habías empezado y salir a buscar tus propios rumbos, a elegir el camino que quieres recorrer. Es en ese momento cuando al separar a ese Oso, esa Oveja y esa Ardilla, que caen en cuenta que haber vivido juntos, haber discutido, haber comido y dormido a veces bien otras no, con todas sus diferencias, habia sido un tiempo maravilloso, aquel nido se vació y volvió a llenarse con los retoños, algunas rutinas aún permanecen intactas, no todo lo planeado ha salido bien, pero también lo improvisado ha resultado y ahí viene el equilibrio, así que ¿por qué no? Todos son felices a su manera.
Para los que aún no han caído en cuenta, esa ardilla era yo!
Dedicado a mis hermanos: José Rafael y Angela María… mis primeros maestros y la brújula de mi vida.
Siolly Rios
• 7 years agoLo supe desde el principio!!! ? Que hermoso el cuento. Me sacaste risas y lágrimas. Quiero mucho a todos los personajes de esta historia!!! ❤
Hildamar Camejo
• 7 years agoQue bueno Siolucha, que bueno que te gusto! Siempre disfruto mucho tus comentarios, gracias, TQM
Yarai Alvarez
• 7 years agoGuaooo. Que hermoso me fascino. De verdad que fabula tan hermosa. Deberias publicarlo.
Hildamar Camejo
• 7 years agoGracias mi Yarucha querida, es un cumplido viniendode ti que escribes tan hermoso…
Ilsi
• 7 years agoHilda querida hermoso hermoso tu escrito. Eres la ardilla más enérgica y noble que conozco…no dejas de darnos lo mejor de ti…Dios te bendiga …a ti tus hermanos y tu bella familia
Hildamar Camejo
• 7 years agoMi Ilsi querida, gracias, pero no hago sino retribuir un poco lo que recibo de todos ustedes, bendiciones a toda tu familia tambien!
Gleydis Rodríguez
• 7 years agoHermoso mi Hilducha !!! La ardilla llego lejos muy lejos , siempre he sido partidaria que la intranquilidad es una virtud más q un defecto ….. bello relato y realmente son tal cual como lo describes … pasamos momentos muy alegres jajajajajaja los recuerdo con cariño
Hildamar Camejo
• 7 years agoGracias mi Gleiducha querida, hemos sido primos muy unidos y por eso en mas de un episodio estaban tu y Coca metidas, jajajjaa, los quiero con todo mi corazon!
isidastamatti@gmail.com
• 7 years agoMi Amore que belleza ❤️❤️❤️asi es como tu dices , esa es la vida ,lo importante de todo es sembrar para despues cosechar. alli te dejo eso. Un fuerte abrazo. Me encantan tus historias. ???
Hildamar Camejo
• 7 years agoGracias Amore… Un fuerte abrazo para ti tambien, te quiero!!
Beverly
• 7 years agoHilda! Que gusto tan grande le estas dando a tu espiritu y a tus fieles lectores, al expresar tanta belleza a travez de tus sentidas palabras. He llorado, he reido, y he disfrutado cada uno de tus post. Tu blog nos regala todos esos sublimes y sagrados sentimientos… Recordar es VIVIR… y leer lecturas que llegan hasta la intimidad de tu alma… es SENTIR la vida misma… BRAVO!!!
Hildamar Camejo
• 7 years agoBebuchina querida, tu eres parte importante de todos esos momentos y ahora tambien lo es tu pequena familia, nuestros hijos han continuado el vinculo que nosotras iniciamos desde muy pequenita, definitivamente es una bendicion tenerlos en mi vida!… Los quiero muchisimo!Gracias!!
Gabriela Ferazzoli
• 7 years agoEn un tiempo viví de cerquita, adore y ame a esta familia peculiar… hoy desde la distancia los extraño, añoro, recuerdo y adoro a ese oso, a la oveja y a la ardilla que tanto me dieron y enseñaron… bello amiguita!!! cuando lo publicas? pa cuando el libro?? besos y bendiciones
Hildamar Camejo
• 7 years agoMi Gaby querida, hoy mas que nunca los tengo presente a todos ustedes, haberlos tenido y disfrutado al maximo es uno de mis mayores tesoros! Te abrazo con todo mi corazon!! Bendiciones a todos los tuyos.
Luceida
• 7 years agoComaaaaaaa, sabes que estoy en días de gran sensibilidad… Jajajajaja no hace falta decir que mojé el teléfono.
Esa ardilla inquieta y necia, junto a su amado castor trabajador y sus ardillitos dejando la madriguera, siempre han sido un capítulo hermoso y amado en nuestro nido.
Gracias por tus publicaciones, también las amo ?
Hildamar Camejo
• 7 years agoMi amada Luce, siempre es un honor todo lo que venga de ustedes, tu comentario me llena de emocion y ustedes tambien tienen un lugar privilegiado en nuestro mundo y en nuestras vidas!Los adoramos!!!